Llegan las nuevas añadas de ‘Alma de Luzón’ y ‘Por Tí’ a Bodegas Luzón.
Tras agotarse en menos de siete meses las anteriores añadas con unas críticas excepcionales, se acaba de lanzar al mercado ‘Alma de Luzón’ 2019 y ‘Por Tí’ 2019.
Tanto ‘Alma de Luzón’ 2018 como ‘Por Tí’ 2018 fueron un éxito de ventas, como demuestra la rapidez con la que se agotaron las botellas en bodega, no en balde esta añada pasada de ‘Alma de Luzón’, fue definida por la crítica especializada como ‘la mejor añada de Alma de Luzón hasta la fecha’, obteniendo 93 puntos tanto en la ‘Guía Peñín’ como en las valoraciones de ‘Wine Enthusiast’, idénticas puntuaciones a las obtenidas por la misma añada de ‘Por Tí’.
Agotada la añada 2018, os presentamos la añada 2019 de ambos vinos. Un año que comenzó con un invierno de temperaturas suaves y escasas precipitaciones, escasez que se corrigió con abundantes lluvias primaverales al final de la estación, qué unidas a las bajas temperaturas en ese periodo, produjeron un retraso en la floración y el cuajado. En cuanto al verano, éste fue extremadamente seco y caluroso, algo que la viña resistió gracias a las buenas reservas hídricas resultantes de las precipitaciones primaverales, que permitieron que el viñedo se mantuviese robusto, con buena vegetación y sarmientos vigorosos.
Todas estas circunstancias produjeron que la añada de 2019, debido a unas condiciones meteorológicas adversas en las primeras fases del ciclo de la viña, sufriera un descenso considerable de la producción, y ese caluroso verano diera como resultado uvas de pequeño calibre, buena acidez, frescura y adecuada concentración.
En esta nueva añada de ambos vinos, Bodegas Luzón sigue en su línea de continuidad en la expresión de la uva Monastrell, consolidándose como referentes de la D.O.P. Jumilla, sin perder un ápice de esa frescura y elegancia que caracteriza a estos vinos.
Por Tí
‘Por Tí’ es un coupage compuesto por Monastrell y Cabernet Sauvignon, elaborado mediante vendimia manual seleccionada a partir de viñedos de la propiedad, situados a 600 metros de altitud.
Tras una crianza de 18 meses en barrica nueva de roble francés y americano, el resultado es un vino moderno, rico, potente de estructura, dulce al tacto, sabroso… dónde se conjuga la concentración, con la expresión de la mejor fruta seleccionada.
Alma de Luzón
En este ‘blend’ de Monastrell y Syrah, no se emplean levaduras seleccionadas y se apuesta por una mínima intervención humana.
Para su elaboración se realiza una vendimia manual y una posterior exquisita selección de racimos. Su fermentación alcohólica se realiza en barricas de 500 kg. para luego pasar a barricas nuevas de roble francés y americano, donde se desarrolla la fermentación maloláctica y crianza durante 22 meses, tras los cuales pasará 16 meses en botella antes de salir al mercado.